PROYECTO
EL CASTILLO
“Hasta el más insignificante de tus actos adquiere valor si actúas con amor, por amor, siendo el amor.”
Chiara Lubich.
¿QUIENES SOMOS?
Somos un Proyecto social sin fines de lucro que actualmente brinda acompañamiento familiar y apoyo escolar a 52 niños, niñas, adolescentes y sus familias de la Población El Castillo. El Proyecto se inicia el año 2006, fruto de la iniciativa de Familias Nuevas del Movimiento de los Focolares, que impulsan un proyecto de solidaridad internacional de Adopción a Distancia, siendo Chile uno de los países beneficiado por el Proyecto, el cual conectó a padrinos italianos con niños y niñas de la Población. Actualmente recibimos el financiamiento de padrinos italianos y también chilenos. Formamos parte de la Red de Organizaciones Sociales del Carisma de la Unidad de América Latina y El Caribe, cuyo objetivo es promover la erradicación de las desigualdades sociales a través de la Cultura de la Fraternidad.
¿DÓNDE INTERVENIMOS?
Trabajamos en la población “El Castillo” que está ubicada en la comuna de La Pintana y fue poblada masivamente entre los años 85 al 94, producto de la erradicación de los sectores más pobres de otras comunas del Gran Santiago. En esta época, casi se triplicó la cantidad de habitantes, de 80.000 a 190.000 en menos de 10 años. Los habitantes de La Pintana deben enfrentar a diario la exclusión social y la estigmatización, además de la cesantía, empleos precarios, violencia producto del tráfico de drogas, violencia intrafamiliar y altos niveles de deserción escolar: de hecho, los porcentajes de sus Habitantes al año 2011 completa y con estudios superiores correspondieron, respectivamente, al 23,1 y 19,6 % y el 37% de habitantes de la comuna ni siquiera supera la enseñanza básica.
NUESTRO HORIZONTE
Queremos que los niños, niñas y adolescentes de esta población y pertenecientes principalmente al colegio Marcelino Champagnat puedan completar su escolaridad, incorporando a su educación no sólo conocimientos académicos sino también herramientas de socialización y crecimiento integral, con esta meta realizamos una labor de promoción humana, acompañamiento escolar (clases de reforzamiento los días sábados) y familiar (encuentros y actividades bimensuales para la familia) y aportamos a sus necesidades de vestimenta, alimentación y materiales escolares.
El amor al hermano forma parte de la espiritualidad de la unidad y constituye en ella un primer paso para realizar el mandamiento del amor reciproco
NUESTRA CONSIGNA
Creemos que es posible construir un mundo más justo y fraterno, donde se promueva el respeto y el bien común, deseamos contribuir al protagonismo y participación de los más excluidos de nuestra sociedad a través del diálogo y la reciprocidad.